
Los gatos, al igual que otros animales, pueden verse afectados por garrapatas, parásitos externos que no solo generan molestias en la piel, sino que también pueden transmitir enfermedades de gravedad.
A lo largo de este artículo de Clínica Veterinaria Prada abordamos dcómo reconocer su presencia, cómo prevenirlas y cuál es la forma adecuada de eliminarlas.
¿Qué son las garrapatas y cómo afectan a los gatos?
Las garrapatas son ectoparásitos que se alimentan de la sangre de sus hospedadores. En los felinos, se adhieren firmemente a la piel, provocando inflamación local, picor y, en ocasiones, complicaciones más serias si son portadoras de agentes infecciosos. A pesar de su pequeño tamaño, pueden transmitir enfermedades potencialmente peligrosas a través de su picadura.
Síntomas comunes de infestación
Algunos signos que pueden indicar la presencia de garrapatas en un gato incluyen:
- Disminución del apetito
- Rasquidos constantes
- Fiebre leve
- Presencia de bultos o protuberancias en la piel
Ante cualquiera de estos síntomas, es importante revisar al animal y actuar con rapidez.
Pasos para detectar y retirar garrapatas
1. Exploración física del gato
La detección temprana es clave. Las garrapatas pueden verse a simple vista, pero también es posible identificarlas palpando el cuerpo del animal, especialmente en zonas cálidas y poco visibles como el cuello, orejas, axilas o entre los dedos.
2. Mantener la calma
Al encontrar un parásito, es importante no actuar de forma impulsiva. Una extracción incorrecta puede dejar partes del cuerpo de la garrapata incrustadas, lo que aumenta el riesgo de infección.
3. Cepillado diario
Cepillar el pelaje del gato con regularidad no solo ayuda a mantenerlo saludable, sino que también puede evitar que garrapatas recién adheridas se fijen completamente a la piel.
4. Extracción segura con pinzas
Si decides retirarla en casa, utiliza unas pinzas finas o tenazas especiales. Agarra la garrapata lo más cerca posible de la piel y tira suavemente hacia afuera, de forma constante y sin giros, para evitar que partes del parásito queden dentro del animal.
5. Consulta veterinaria obligatoria
Aunque la extracción haya sido aparentemente exitosa, es fundamental acudir al veterinario. Solo un profesional podrá confirmar que no haya restos del parásito, evaluar la zona afectada y descartar infecciones o enfermedades asociadas.
Tipos más comunes de garrapatas en gatos
Las especies que con mayor frecuencia afectan a gatos y perros incluyen:
- Ixodes ricinus
- Ixodes hexagonus
- Rhipicephalus sanguineus
- Dermacentor reticulatus
Estas pueden variar en tamaño y color, generalmente presentando tonalidades marrones o negras.
Huevos de garrapatas: un riesgo adicional
Además del parásito adulto, es importante tener en cuenta su ciclo reproductivo. Las garrapatas pueden depositar miles de huevos, los cuales representan una amenaza potencial si no se controla a tiempo. Estos huevos, al madurar, reinician el ciclo de infestación y, en casos graves, pueden favorecer la aparición de patologías más complejas.
Enfermedades transmitidas por garrapatas
Aunque no todas las garrapatas son vectores de enfermedades, algunas pueden transmitir afecciones serias, como:
- Enfermedad de Lyme
- Fiebres hemorrágicas
- Trastornos neurológicos
- Fallo renal, entre otros
Por ello, la vigilancia continua y la atención veterinaria son fundamentales para proteger la salud del gato.
Por ello, si detectas que tu gato tiene garrapatas y no sabes como extraerlas con seguridad te recomendamos que acudas a nuestra clínica veterinaria o te pongas en contacto con nosotros.